Twitter ofrece una solución sencilla a la controversia sobre la etiqueta de “medios patrocinados por el estado”; eliminar las etiquetas por completo. El gigante de las redes sociales también eliminó la etiqueta y la descripción «patrocinado por el estado», que incluye organizaciones como NPR, PBS, así como fuentes de medios influenciados por el gobierno.
Al mismo tiempo, Twitter establece nuevos requisitos para los anunciantes. Los especialistas en marketing ahora deben pagar $ 8 por mes para suscribirse a Twitter Blue o ser verificados como una organización importante, según ha aprendido The Drum. Cualquier anunciante que publique anuncios de al menos $ 1,000 se considerará verificado automáticamente. Twitter afirma que estos requisitos reflejan cambios más amplios en el sistema de verificación que brindarán una experiencia «superior» a los usuarios.
Ambos cambios se produjeron el día después de que Twitter implementara su plan para eliminar las antiguas marcas de verificación. Ahora solo los suscriptores de Blue pueden obtener marcas azules. Las empresas pueden recibir marcas de verificación doradas, mientras que las cuentas gubernamentales y de organizaciones multilaterales pueden recibir marcas grises. Muchas celebridades y organizaciones previamente verificadas se han resistido a pagar por el tiki azul, admitiendo a celebridades como Elon Musk, LeBron James, Stephen King y William Shatner por sus suscripciones azules.
Blue y las nuevas reglas para anunciantes tienen como objetivo reducir la dependencia de Twitter de los ingresos publicitarios tradicionales y recurrir a las suscripciones. Sin embargo, las membresías pueden no ser suficientes este año. Insider Intelligence predice que los ingresos publicitarios de Twitter caerán un 27,9 por ciento en 2023, pero solo un pequeño porcentaje de usuarios se suscribe a Blue.
Los cambios de etiqueta pueden aclarar algunas objeciones, pero no es seguro que las compañías de medios regresen. Al igual que con el primer lanzamiento de Blue, también han surgido cuentas falsas que abusan de la falta de verificación. En otras palabras, Twitter todavía enfrenta cierta confusión y es posible que no pueda resolver estos problemas rápidamente.
Parece que con estos cambios, Twitter tiene como objetivo mejorar la experiencia del usuario y responder mejor a las demandas de los anunciantes y las empresas de medios en la plataforma. Sin embargo, se entenderá con el tiempo cómo las regulaciones y las nuevas reglas satisfarán a los usuarios y anunciantes del gigante de las redes sociales y cómo afectarán los ingresos de la plataforma. Si bien es difícil hacer predicciones precisas sobre el futuro de Twitter en este momento, parece seguro que estos cambios revolucionarios desempeñarán un papel importante en la configuración del futuro de la plataforma.