Aunque el modelo Galaxy S24 FE presentado por Samsung el año pasado atrajo la atención de los usuarios, es difícil decir que las expectativas se cumplieron plenamente. La expectación aumenta con cada renovación del modelo, pero algunas preferencias técnicas pueden impedir este entusiasmo. En este punto, se ha convertido en una cuestión de curiosidad cómo el S25 FE vendrá con un cambio. La preferencia del procesador del modelo Galaxy S25 FE también está en el centro de estas preguntas.
La información de la que se habló en primer lugar indicaba que el Galaxy S25 FE vendría con el procesador Exynos 2400E, al igual que su predecesor. Aunque este chipset es de producción propia de Samsung, se criticó que no cumplía unas expectativas muy altas en cuanto a rendimiento. Por ello, la repreferencia del mismo procesador ha creado confusión entre los usuarios. Pero las últimas filtraciones pueden cambiar este panorama.
Galaxy S25 podría dar la campanada gracias al procesador FE
Según nuevas afirmaciones, Samsung podría recurrir al chipset Dimensity 9400 desarrollado por MediaTek en el modelo S25 FE. Se rumorea que este procesador, que aún no ha sido presentado oficialmente, ofrecerá un alto rendimiento y eficiencia energética. Si esta afirmación se hace realidad, es posible que el Galaxy S25 FE dé un salto importante en cuanto a potencia de procesador. Además de todo esto, se afirma que Samsung sigue queriendo dar prioridad al Exynos 2400E.
Se sabe que hay razones económicas detrás de que Samsung siga prefiriendo Exynos. Este procesador, producido en sus propias fábricas, es más rentable que la subcontratación. Sin embargo, cualquier problema en la capacidad de producción puede llevar a la empresa a buscar soluciones alternativas. En este caso, podría entrar en juego el Dimensity 9400.
En este contexto, no hay una decisión final sobre el chipset para el Galaxy S25 FE. Samsung tomará probablemente su decisión final en función del calendario de producción y de la situación del suministro. Por otro lado, las expectativas de los usuarios parecen decantarse por el procesador más potente de MediaTek. Especialmente el rendimiento en juegos y la eficiencia que proporciona en el uso a largo plazo ponen en primer plano las ventajas de MediaTek.
A pesar de todos estos avances, no se espera ninguna otra innovación importante en el lado del hardware en el modelo S25 FE. En otras palabras, el cambio de chipset puede ser el factor más importante en términos de diferenciación del dispositivo. Esta situación también puede hacer que se remodelen las estrategias de venta. Para atraer la atención del usuario, la diferencia de rendimiento puede ser más importante que nunca.
El Galaxy S24 FE se ofrecía con Snapdragon en algunas regiones y con Exynos en algunos mercados. Esta estructura dual estuvo en el centro de las críticas de vez en cuando por las diferencias de rendimiento. Aún no está claro si habrá una diferencia regional similar en el S25 FE. Sin embargo, los problemas de la cadena de suministro podrían obligar a Samsung a adoptar de nuevo una estrategia similar.
Aunque el procesador de nueva generación de MediaTek aún no se ha presentado oficialmente, llama la atención la afirmación de que se producirá con el proceso de fabricación avanzado de TSMC. Esto significa que el dispositivo puede ofrecer una eficiencia significativa en el consumo de energía. Al mismo tiempo, se afirma que puede ofrecer una experiencia más fluida, especialmente en tareas asistidas por inteligencia artificial. Si viene con el procesador en cuestión, la posición del Galaxy S25 FE en el segmento medio-alto podría reforzarse.
Aunque no hay una fecha clara de cuándo presentará Samsung el dispositivo, se espera que el modelo llegue a los usuarios en el último trimestre del año. Hasta entonces, se cree que se aclararán más detalles técnicos y se ultimará la decisión sobre el chipset. Es seguro que la empresa también tendrá en cuenta la competencia en el mercado en este proceso. Por tanto, la decisión no sólo tendrá un aspecto técnico, sino también comercial.